En Macedonia un tribunal ha condenado a un oso que durante más de un año estuvo complicándole la vida a un apicultor y robándole la miel de las colmenas.
El criminal no llegó a sentarse en el banquillo de los acusados, y ha sido declarado en busca y captura. Que no le pase nada. Eso sí, de momento será la Administración la que tendrá que pagar.
Y yo me pregunto, si encuentran al oso, ¿cómo harán para que restituya lo robado?
En fin, el mundo cada vez se está poniendo más surrealista. Ay, si Yogui levantara la cabeza. Por no hablar del macedonio Alejandro Magno.
0 comentarios:
Publicar un comentario