Entre todos los mensajes con que nos saturan los correos diariamente, siempre podemos encontrar alguno aprovechable.
Transcribo éste literalmente, para que nos demos cuenta del peligro que supone hablar a la ligera de algo que no dominamos o simplemente desconocemos. Si encima tiene que ver directamente con nuestra profesión, el ridículo puede ser antológico. Las palabras las carga el diablo; siempre hay alguien que nos vigila, amigo.
"La famosa escritora española Lucía Echevarría, ganadora del Premio Planeta, dijo en una entrevista que murciélago era la única palabra en el idioma español que contenía las cinco vocales.
Un lector, José Fernando Blanco Sánchez, envía la siguiente carta al periódico ABC:
Un lector, José Fernando Blanco Sánchez, envía la siguiente carta al periódico ABC:
Para ampliar su conocimiento. Carta al director del diario ABC
Acabo de ver en la televisión estatal a Lucía Echevarría diciendo que murciélago es la única palabra en el idioma español que contiene las cinco vocales.
Mi estimada señora, piense un poco y controle su euforia.
Un arquitecto escuálido, llamado Aurelio o Eulalio, dice que lo más auténtico es tener un abuelito que lleve un traje reticulado y siga el arquetipo de aquel viejo reumático y repudiado, que consiguiera en su tiempo ser esquilado por un comunicante, que cometía adulterio con una encubridora, cerca del estanquillo, sin usar estimulador.
Señora escritora, si el peliagudo enunciado de la ecuación le deja irresoluta, olvide su menstruación y piense de modo jerárquico.
No se atragante con esta perturbación, que no va con su milonguera y meticulosa educación.
Y repita conmigo, como diría Cantinflas: '¡Lo que es la falta de ignorancia!' "
No somos nadie. Bueno, yo sí.
0 comentarios:
Publicar un comentario