Imagino que estarán comprando estos días décimos y participaciones de la Lotería de Navidad como locos: en las administraciones, en los bares, en el hiper, en la carnicería, en Casa Manolo... Bueno, pues que tengan suerte, y si les toca el Gordo, que Hacienda no les esquilme demasiado.
¡Pobre chavalín, esta noche va a tener pesadillas! ¡Que alguien le dé un Valium!
Uno, que en su vida ha comprado un
ResponderEliminardécimo de lotería -ni tan siquiera por Navidad-, se llenó de nuevas razones al contemplar este anuncio fiel espejo del espíritu navideño. Puestos a poner zombies, joér, sólo faltaba el Borbón y su discurso...
Entonces al chavalín le da algo.
ResponderEliminarEstoy convencido que el publicista es enemigo del juego por razones religiosas o algún trauma infantil como ser hijo de ludópata....
ResponderEliminar.....a saber la pasta que les habrá costado, una pena con el talento publicitario que anda suelto.
ResponderEliminarPues a mi no me joden la navidad ni estos zombis.
ResponderEliminarA mi me gusta mucho la navidad, ya me gustaba en el siglo XX antes de cristo y ni cristo me jode a mi la navidad, con la cosecha guardada, el ganado recogido, la nieve cayendo, la familia alrededor de la lumbre mientras con mi navaja hago juguetes de madera para los niños, su madre les prepara dulces, es tiempo de ocuparse de la familia, es tiempo de hacer feliz a los hijos, de olvidar agravios y reconciliarse con los vecinos del pueblo, de tomarse algo con los amigos, es tiempo de parar la guerra, es navidad.
Ahí te he visto, Finchu. ¡Vivan las Saturnales!
ResponderEliminarYo lo quito y tú lo pones:)
ResponderEliminarPobre (mi)Montse, menos mal que ella es de las que se ríen de su sombra.
A la que no le habrá hecho mucha gracia es a la otra fémina del grupo, la que está encantada de haberse conocido.
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