Nos traemos a La Taberna la magnífica entrada de Gatopardo en su blog No todos los gatos son pardos. Es que somos así de piratas, aunque en este caso contamos con su permiso, que conste.
El arte abstracto en España surgió mucho más tarde que en otros sitios del mundo, una vez que los artistas españoles importantes creadores de las vanguardias que hoy consideramos históricas se vieron encerrados en las paredes del arte figurativo. Ese atraso en relación a otros países fue resaltado por la dictadura impuesta aquí justamente cuando la abstracción ganaba seguidores por el mundo.
Quizás la libertad que suponía el arte abstracto – donde no se imitaba formas o figuras reales, sino que se creaba un lenguaje visual autónomo existente totalmente aparte del mundo real – sonaba como una amenaza al severo régimen de autarquía. Más que utilizar una técnica de pintura, el arte abstracto era, como muchas vanguardias, una forma de expresar ideas, de tomar posturas muchas veces de contra a las imposiciones de la sociedad.
Al final de los años 50, fue esa la decisión tomada por muchos artistas españoles que decidieron arriesgarse con un estilo pictórico que seguramente sería rechazado e incomprendido, pero que simbolizaba los pensamientos contradictorios y los sentimientos más puros de los artistas. Fue entonces que estos pudieron servirse de cualquier tema, técnica, estilo o material con entera libertad, para comprender el sentido ético de esas posturas y las dificultades de todo orden que entrañaba tomarlas.
La gran mayoría de los artistas abstractos españoles vivieron en otros países de Europa, deseando con el alma poder practicar no solamente estas novedosas técnicas en su país, pero también practicar la libertad de expresión que este arte simbolizaba.
Algunos de los principales representantes del arte abstracto español son Antoni Tàpies, Modest Cuixart, Manuel Millares, Antonio Saura, Luis Feito, Manuel Rivera, Rafael Canogar, Martín Chirino Amadeo Gabino, Eusebio Sempere, Jorge Oteiza, Néstor Basterrechea, Eduardo Chillida, Gustavo Torner, Gerardo Rueda entre otros.
Para quien se interesó por la historia del arte abstracto puede conocer un poco más de la abstracción en España en el Museo de Arte Abstracto Español, ubicado en Cuenca. La institución cuenta con más de 127 pinturas y esculturas de artistas españoles de la Generación Abstracta que, a mediados del siglo XX irrumpieron en la escena artística española.
El arte abstracto en España surgió mucho más tarde que en otros sitios del mundo, una vez que los artistas españoles importantes creadores de las vanguardias que hoy consideramos históricas se vieron encerrados en las paredes del arte figurativo. Ese atraso en relación a otros países fue resaltado por la dictadura impuesta aquí justamente cuando la abstracción ganaba seguidores por el mundo.
Quizás la libertad que suponía el arte abstracto – donde no se imitaba formas o figuras reales, sino que se creaba un lenguaje visual autónomo existente totalmente aparte del mundo real – sonaba como una amenaza al severo régimen de autarquía. Más que utilizar una técnica de pintura, el arte abstracto era, como muchas vanguardias, una forma de expresar ideas, de tomar posturas muchas veces de contra a las imposiciones de la sociedad.
Al final de los años 50, fue esa la decisión tomada por muchos artistas españoles que decidieron arriesgarse con un estilo pictórico que seguramente sería rechazado e incomprendido, pero que simbolizaba los pensamientos contradictorios y los sentimientos más puros de los artistas. Fue entonces que estos pudieron servirse de cualquier tema, técnica, estilo o material con entera libertad, para comprender el sentido ético de esas posturas y las dificultades de todo orden que entrañaba tomarlas.
La gran mayoría de los artistas abstractos españoles vivieron en otros países de Europa, deseando con el alma poder practicar no solamente estas novedosas técnicas en su país, pero también practicar la libertad de expresión que este arte simbolizaba.
Algunos de los principales representantes del arte abstracto español son Antoni Tàpies, Modest Cuixart, Manuel Millares, Antonio Saura, Luis Feito, Manuel Rivera, Rafael Canogar, Martín Chirino Amadeo Gabino, Eusebio Sempere, Jorge Oteiza, Néstor Basterrechea, Eduardo Chillida, Gustavo Torner, Gerardo Rueda entre otros.
Para quien se interesó por la historia del arte abstracto puede conocer un poco más de la abstracción en España en el Museo de Arte Abstracto Español, ubicado en Cuenca. La institución cuenta con más de 127 pinturas y esculturas de artistas españoles de la Generación Abstracta que, a mediados del siglo XX irrumpieron en la escena artística española.
Este Gatopardo es un artistazo.
ResponderEliminarPo zi.
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