Me he emocionado al ver como los papás se acercaban para que abrazaran a sus niños. Un mundo donde las personas salen a nuestro encuentro con un abrazo, abrazan, con alegría, son amigables. Delicioso mensaje.
Bueno... pues... un abrazo, taberneros y visitantes -ellas y ellos ;) .
Puede ser, puede ser, Gatopardo, pero tampoco hay que ser tan mal pensado, hombre, y en todo caso un abrazo no hace mal a nadie (incluso a Nadie). Mejor un abrazo que una patada en los..., dónde va a parar.
Hace unos días paseando por mi ciudad, San Sebastián, vi a un chico como el del video que llevaba el mismo cartel. Observé qué pasaba, no se acercó nadie y me dió pena.
¿Y los traéis a domicilio?
ResponderEliminar¿La oferta es sólo para hoy?
¡Quiero cieeeeennnnnnn!!!!
Me he emocionado al ver como los papás se acercaban para que abrazaran a sus niños. Un mundo donde las personas salen a nuestro encuentro con un abrazo, abrazan, con alegría, son amigables. Delicioso mensaje.
Bueno... pues... un abrazo, taberneros y visitantes -ellas y ellos ;) .
Y a Pepe Espurz, también.
Abrazos para todos.
ResponderEliminarEso está bien. Con crisis o sin ella. No cuesta dinero y hace un poco más feliz el mundo.
No cuestan nada, nos beneficiamos todos, y la oferta es para los restos.
ResponderEliminarDan ganas de abrazarse a todo el mundo y repartir instantes.
ResponderEliminarSi los regalan puede que nadie se apunte pero si los cobraran es posible que hubiera cola, somos así.
ResponderEliminar¡Feliz año!
Por cierto, por aquí dicen que "al xato que nace muerto es igual que le soples como que no"
Eso también lo dicen en Campoo, Logio.
ResponderEliminarUn abrazo.
Pues un abrazo :D
ResponderEliminarEso es para sedar y preparar a la peña para los recortes económicos.
ResponderEliminarUn abrazo, Alma.
ResponderEliminarPuede ser, puede ser, Gatopardo, pero tampoco hay que ser tan mal pensado, hombre, y en todo caso un abrazo no hace mal a nadie (incluso a Nadie). Mejor un abrazo que una patada en los..., dónde va a parar.
Hola
ResponderEliminarHace unos días paseando por mi ciudad, San Sebastián, vi a un chico como el del video que llevaba el mismo cartel. Observé qué pasaba, no se acercó nadie y me dió pena.
Miles de abrazos para todos. Nunca sobran.
Saludos.
Pues un abrazo para tí, María Eugenia, y también para el chico al que nadie quiso abrazar.
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